Es bastante usual pensar que la ingeniería en Geociencias solamente te permite trabajar en sectores cotizados como el sector minero o industrias del petróleo. Pues no, existe mucho más por hacer en Geociencias. Para poner un ejemplo, voy a narrar una de las últimas salidas de campo en las que participé. Se trata de explorar unas cavernas formadas naturalmente para hacer trabajos de paleoclimatología, Específicamente investigar si hace miles de años la Amazonía experimentó eventos extremos de lluvias o sequías. ¿Para qué hacer esto? Pues para saber si en un futuro podríamos vernos afectados por fenómenos extremos.
La salida comienza asegurándonos de que tenemos todo el equipo necesario para la exploración. La integridad personal es siempre la prioridad durante las expediciones de campo. Una vez que tenemos cascos, linternas, botas y un buen guía, comienza la exploración. En esta ocasión nuestro equipo está conformado por expertos en Paleoclimatología-Glaciología, Hidrogeología, y Geotecnia.
Al momento de ingresar a una caverna lo primero que uno siente es un cambio de temperatura y humedad. El ambiente es frío y bastante húmedo. Paulatinamente la luz natural va desvaneciendo, pero las paredes y techo de las cavernas parecen brillar debido a las pequeñas gotas de agua que se forman y van reflejando la luz de las linternas. El bullicio de las aves e insectos de la Amazonía se hace menos perceptible.
Eventualmente no se escucha nada mas que el sonido de nuestros pasos. De momento notamos que no estamos solos en la caverna. Algunos insectos se mueven muy sigilosos o permanecen estáticos mimetizándose con su entorno Son grillos y también arañas adaptados a vivir en ambientes de perpetua oscuridad. De momento notamos la presencia de amblipigios, unas extrañas criaturas de aspecto tenebroso que parecen una mezcla entre arañas y escorpiones. Nos seguimos adentrando en la caverna y llegamos a encontrar un pequeño río subterráneo. Cruzamos con cuidado acompañados por el revoloteo de murciélagos que vuelan tan cerca de nosotros que sentimos que nos van a chocar.
Finalmente llegamos a ver algunas estalagmitas activas las cuales van creciendo a medida que el agua va depositando minerales los que se depositan progresivamente. Después de buscar una estalagmita adecuada, notamos que no existe ninguna que tenga las características que necesitamos. Tomamos algunas fotografías y comenzaron nuestro camino de retorno en busca de una nueva cueva.